Dentro de las técnicas de lipoescultura, la más avanzada es la láser lipólisis, que llegó hace poco al país, y presenta mejores ventajas frente a la liposucción convencional.

La técnica de laserlipólisis se basa en la eliminación de adipocitos mediante la emisión intra-tisular de un haz de luz monocromática (láser) específica para destruir el tejido graso.

La técnica de láser lipólisis se ha planteado para hacer posible la destrucción de los excesos de tejido graso discretos en zonas anatómicas localizadas. Tiene como valor complementario crítico el tratamiento de la piel de la zona. Se produce el tensionado de la misma y facilita su adaptación.

Hay corrección de la flacidez previa existente, sobre todo en áreas con menor capacidad de contracción, tal y como sucedía en la liposucción tradicional. Esto permite el acceso al tratamiento a zonas más complicadas en la liposucción convencional, como puede ser papada, rollitos altos de sujetador, cuello, espalda, estómago o cara interna de brazos y muslos.

También para pieles desvitalizadas y con difícil retracción, como algunos casos de mujeres con abdomen post-embarazo. Es una herramienta interesante para la realización de lipo-correcciones en pacientes de más edad en quienes la flacidez resultante después de una liposucción convencional la contraindica. Todo ello gracias a la contracción cutánea concomitante al efecto de “Skin-Thightening” producido por la liberación de las HSP o proteínas de choque térmico.